Capitulo 24

Pedro estaba muy dolido, no podía creer que Paula le haya dicho que lo odiaba, mas allá de toda la discusión que estaban teniendo, no esperaba eso. Escuchaba las palabras de Zaira y se confundía cada vez más: después de todo lo que había pasado entre ellos ya no sabia que era lo que sentía por Paula, la quería muchísimo pero cuando le dijo que lo odiaba se sintió muy mal. Cuando Zaira dijo “amor mutuo” se sorprendió… ¿Paula estaba enamorada de él? A ella le brillaron los ojos en ese momento y él tomo esa reacción como una confirmación.

No salía de su asombro, unas semanas atrás Paula ni siquiera sabia de su existencia y ahora era ella la que estaba frente a él mirándolo con… ¿amor?

Cuando volvió a la realidad Zaira ya no estaba, solo ella mirándolo. Se sentía nervioso, la miraba y le temblaban las piernas, definitivamente le pasaba algo muy fuerte con ella y temía echarlo a perder. Nadie hablaba, él no sabia que decir pero era obvio que ella no iba a hablar; dijo lo primero que se le paso por la cabeza, mejor dicho… por el corazón:

Pedro: perdón

Paula: perdoname vos a mí por todo lo que te dije –sin mirarlo-

Pedro: Pau, mirame –Paula seguía esquivándole la mirada-

Pedro: Paula, necesito decirte algo

Paula: -mirándolo- ¿Qué?

Pedro: estoy confundido

Paula: yo también

Pedro: Zai tiene razón

Paula: ¿en que?

Pedro: en que nos lastimamos

Paula: si, me parece que tenemos que hacer algo

Pedro: ¿en que pensas?

Paula: no se Peter, creo que la única solución es –haciendo una pausa- que nos alejemos –angustiada-

A Pedro le cayó como un balde de agua fría, sabia que ella también estaba dolida y aunque en ese momento solo quería abrazarla debía respetar su decisión, capaz que así todo iba a estar mejor pero dudaba de que estar lejos de Paula le haga bien…

Pedro: ¿estas segura?

Paula: no. Ya me estaba acostumbrando a verte o hablar con vos, va a ser difícil pero es la única solución que encuentro

Pedro: este bien, no te voy a obligar a nada

Paula: pero decime que opinas

Pedro: no se Pau, la verdad no me esperaba que me digas eso pero tengo que aceptarlo

Paula: no quiero que estemos mal

Pedro: espero que esta decisión no nos juegue en contra

Paula: ¿Cómo?

Pedro: digo que capaz que si nos alejamos… -se abrió al puerta, era Zaira-

Zaira: perdón que los interrumpa pero Pau, te esta buscando El Chato urgente

Paula: este bien, ahora voy. Dame un minuto

Pedro seguía parado en el mismo lugar, sabia que ese minuto iba a ser la despedida y lo que menos quería era desperdiciarlo…

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Bueno, no se me enojen... piensen que si todo fuera fácil la novela seria aburrida.